ROBERT MULLIGAN: Adiós a la inocencia representa la primera monografía publicada a nivel mundial consagrada al análisis de la obra del director de largometrajes tan emblemáticos como Matar un ruiseñor (1962) o Verano del 42 (1971). A través de las veinte producciones cinematográficas que llegó a dirigir se puede llegar a la conclusión que Mulligan responde a la consideración de «autor» en el más amplio sentido del término, poseedor de unas señas de identidad comunes en la plana mayor de sus trabajos para el medio donde alcanzó notoriedad. Más que ningún otro miembro de la «Generación de la televisión» Mulligan prefirió preservar un cierto anonimato, a juego con una personalidad un tanto reservada, celosa de su privacidad y con un agudo instinto para detectar aquellas novelas, obras teatrales o guiones originales susceptibles de quedar integrados en su particular universo, a menudo observado desde el prisma de adolescentes o jóvenes.