¿Se puede hablar con los muertos? La madre de Eva Escudero siempre lo había creído. Eva, ejemplar trabajadora de la Unidad Central de Inteligencia Criminal, nunca lo había aceptado. Ahora, desde su reciente cargo de inspectora, alucinada con el espeluznante caso que está investigando, no deja de preguntarse, si debe aceptar las creencias de su madre. La investigación sobre la serie de homicidios que tendrán lugar, tras la aterradora y macabra muerte de Valeria Cano, descubierta junto al cadáver de su padre, pondrán al descubierto una serie de sobornos, corrupciones políticas, y atentados, que ocurrieron años atrás. Sucesos que afectarán en la actualidad, al comisario Eduardo Martín, superior de Eva Escudero, y a Juan Ramos, el enigmático director del departamento forense, un seguidor apasionado de la nigromancia, una rama de la hechicería que permite comunicarse con los muertos mediante el análisis de sus vísceras. Técnicas que intenta utilizar, para comunicarse con su esposa, atropellada por un vehículo que se dio a la fuga y descubrir, de esta forma, al culpable de su muerte. Asesinato, que sus compañeros del cuerpo de policía, nunca fueron capaces de esclarecer. A medida que avanza la investigación criminal, las inquietantes posesiones infernales, los fenómenos que desafían la lógica y otras experiencias sobrecogedoras, harán tambalear las convicciones de la joven inspectora, Eva Escudero.