Palacios es un hombre en la cuarentena que trata de abandonar la que ha sido su profesión en los últimos tiempos: asesino a sueldo. Un golpe de suerte, en forma de encargo muy bien pagado, parece abrir la posibilidad de su retirada, pero una vez efectuado el trabajo todo empieza a complicarse y tanto su recompensa como su propia integridad comenzarán a correr un grave peligro. Con el fin de cobrar su dinero, Palacios tendrá que deambular por las cloacas de un mundo que le es por completo ajeno: el de las grandes finanzas provenientes del pelotazo urbanístico.