Noches de Amor efímero IV, está compuesta por las obras: La noche inmensamente feliz, Noche inesperada -el masajista-, La noche que di a luz, La noche en bicicleta, La noche que dejé de ser gorda, Noche de guateque, La primera noche, Una noche romántica, Fui barro esa noche, Esta noche la final, Noche y cenizas, Noche de amor con un mosquito, La noche del espantapájaros, Noches aliadas. Pedrero, maestra en la condensación, consigue que personajes disparejos, que salen de los rincones de la ciudad acompañados por la insatisfacción y la soledad, vivan una experiencia fugaz e inolvidable. Las tramas desarrollan una mezcla de situaciones cómicas, tristes, y siempre reconocibles, que ocurren en la oscuridad incitadora de la noche. A través de la mirada sutil y hondísima de la autora, se descorchan los corazones más empedernidos, revelando historias de secretos anhelos de una conexión humana, tan necesaria como complicada en estos tiempos.