Este libro explora la relación entre ciencia y fe, argumentando cómo el creacionismo cristiano y la teoría de la evolución no son necesariamente opuestos. A través de un análisis claro y accesible, el autor desmonta el fijismo tradicional y propone una interpretación simbólica de los relatos del Génesis, compatible con los descubrimientos científicos actuales. Jesús Silva plantea una visión en la que Dios actúa a través de los procesos evolutivos, sin que ello reste valor ni sentido espiritual al ser humano. ¿Y si la historia de Adán y Eva no contradijera, sino que completara la de Homo erectus? ¿Y si el Diluvio, la Torre de Babel y la expulsión del paraíso escondieran verdades más profundas que los hechos literales? Una obra que invita al diálogo entre teología y ciencia, y que demuestra que la fe no es incompatible con la razón y la ciencia, sino que son verdades complementarias.